A TRABAJAR

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Mi estupendo taller-cocina

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viernes, 29 de octubre de 2010

Casi, casi, regalada.

No todo lo tienes que comprar.
Paseando por la calle te encuentras auténticos regalos, como las cuatro patas de esta mesa que pertenecían a una mesa de cocina normal tirada por desuso y que después de un lijado a conciencia demostraron ser de madera de haya.   Así que bastó fabricarle un tablero circular, los cuatro travesaños y usar los propios herrajes que tenía la mesa para tener una nueva.   En las fotos no se ve el resultado final, pero con tres manos de barniz tinte color roble quedó genial en casa de mis padres.   Ahí lleva unos tres años y le quedan bastantes más.

1 comentario:

  1. Desde luego lo tuyo es el bricolage, hay que ver que imaginación y maña tienes. Un saludo de tu compañera de curso Amparo

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